La vajilla de melamina se fabrica a partir de polvo de resina de melamina mediante calentamiento y moldeo por inyección. Según la proporción de materias primas, se clasifica en tres grados principales: A1, A3 y A5.
El material de melamina A1 contiene un 30% de resina de melamina y un 70% de aditivos, almidón, etc. Si bien la vajilla fabricada con este tipo de materia prima contiene cierta cantidad de melamina, tiene características plásticas, no resiste altas temperaturas, se deforma fácilmente y tiene poco brillo. Sin embargo, su precio es bastante bajo, lo que la convierte en un producto de gama baja, adecuado para México, África y otras regiones.
El material de melamina A3 contiene un 70% de resina de melamina, y el 30% restante son aditivos, almidón, etc. El color de la vajilla fabricada con material A3 no difiere mucho del de la vajilla fabricada con material A5. Puede que a primera vista no se note la diferencia, pero con el uso prolongado, la vajilla fabricada con material A3 tiende a decolorarse, perder brillo y deformarse con el calor. Las materias primas del A3 son más baratas que las del A5. Algunos comercios venden productos A3 haciéndolos pasar por A5, por lo que es fundamental que los consumidores verifiquen el material antes de comprar vajilla.
El material de melamina A5 es resina de melamina 100% pura, y la vajilla fabricada con esta materia prima es de melamina pura. Sus características son excelentes: no es tóxica, es insípida, ligera y conserva el calor. Tiene el brillo de la cerámica, pero con un tacto superior al de la cerámica común.
A diferencia de la cerámica, es frágil y pesada, por lo que no es apta para niños. La vajilla de melamina es resistente a las caídas, no se rompe fácilmente y tiene un aspecto elegante. Soporta temperaturas de entre -30 °C y 120 °C, por lo que se utiliza ampliamente tanto en hostelería como en el hogar.

Fecha de publicación: 15 de diciembre de 2021